Columna sobre Economía, Comercio e Inversión. 15 de diciembre de 2023

China en América Latina: Tejiendo lazos comerciales con pragmatismo  

Por Jorge López Arévalo
Desde su incorporación a la Organización Mundial de Comercio (OMC) en 2001, China irrumpe en América Latina y el Caribe con el objetivo de comerciar con esta región que no había estado entre sus socios comerciales tradicionales. Por tanto firmó Tratados de Libre Comercio (TLC) con Chile, Costa Rica y Perú, en tanto otras naciones latinoamericanas consideran a China como su aliado geopolítico como es el caso de Cuba, Bolivia, Nicaragua y Venezuela.
En perspectiva comparada, los resultados en América Latina muestran una relación comercial un poco más fuerte de China con los países con que tiene TLC, en relación a un comercio de menor perfil con aquellos que, desde América Latina y el Caribe, la consideran como su socio geopolítico. En este contexto, el peso de China es creciente y va tejiendo lazos comerciales con pragmatismo, en muchos países latinoamericanos se ha convertido en el principal socio comercial, desplazando a Estados Unidos, así como en otros países que la consideran su socio geopolítico (Cuba, Bolivia, Nicaragua y Venezuela), aunque China los considere irrelevantes como socios comerciales.
En el panorama contemporáneo los países que consideran a China socio geopolítico en América Latina se caracterizan por dos factores en común: la animadversión hacia la hegemonía de los intereses estadunidenses en la región y la perpetuación en el poder de jefes de Estado afines ideológicamente a los principios del maoísmo y la revolución china. Dicha afinidad no ha sido implícita sino impulsada públicamente por líderes como Evo Morales y Luis Arce Catacora en Bolivia, Fidel y Raúl Castro en Cuba, Daniel Ortega en Nicaragua y Hugo Chávez y Nicolás Maduro en Venezuela.
Aunque Cuba, Bolivia, Nicaragua y Venezuela tienen cierta afinidad ideológica y simbólica hacia China, la estrategia de este país ha sido no intervención en asuntos internacionales. Mientras Cuba y Venezuela están sujetas al bloqueo comercial de Estados Unidos y Bolivia padeció una grave crisis política en el gobierno del presidente Evo Morales, China ha optado por la no intervención y el soft power, llamando al restablecimiento del orden y el apego a las leyes sin realmente ejercer presión en sus otros socios comerciales, por lo cual podríamos sugerir que más que aliado geopolítico lo es simbólico en primer lugar y un socio comercial en segundo.
En términos comerciales, los países con TLC son importantes proveedores de cobre y sus concentrados, refinado, en bruto y cátodos, litio carbonatado, en el caso de Chile y Perú en los dos primeros, no en litio. En cobre y sus concentrados abastecen cerca del 60% y casi la tercera parte del refinado, en bruto y cátodos de las importaciones chinas de todo el mundo, mientras que Chile provee el 94.5% de carbonatos de litio al mercado chino y Perú es el primero de plata y sus concentrados con el 36.58% del mercado chino. Es decir, esos dos países son importantes proveedores de cobre en sus modalidades, Chile en carbonatos de litio y Perú de plata. Por su parte Costa Rica provee circuitos electrónicos integrados (0.56% del mercado chino) e instrumental médico y quirúrgico con el 5.29% del mercado chino y es el quinto proveedor, participando en las cadenas globales de valor, pero sin peso importante en las importaciones chinas de esos productos.
Los países considerados socios geopolíticos de China son irrelevantes y sólo en algunos casos destacan en las importaciones de China. Por ejemplo, en 2022, Cuba es el sexto proveedor de níquel al mercado chino, con el 3.76% de las importaciones chinas del mundo, el primer producto de exportación al gigante asiático con el 36.69% de sus exportaciones; Bolivia es el tercer proveedor de minerales de plata y sus concentrados para China con el 13.06% de sus importaciones y para Bolivia son el  48.33; Nicaragua es el decimoquinto proveedor de China con apenas el 0.60% de sus importaciones, mientras que para éste representa el 53.42% de sus exportaciones; Venezuela es el tercer proveedor de coque de petróleo con el 8.33% del mercado del país asiático, representando el 46.82% de sus exportaciones a China.
Los países con los que se considera a China como su aliado geopolítico en 2022, apenas representan el 0.08% de sus importaciones con el mundo y el de los países con TLC representan el 2.60%, muchas veces más que sus supuestos aliados geopolíticos. Como mercado para China, el peso es menor aun en el caso de los países de TLC, apenas representando el 1.08% de las exportaciones chinas con el mundo, y sus supuestos aliados geopolíticos el 0.15%.
Los países con que China ha suscrito TLC en América Latina son importantes proveedores de minerales, con excepción de Costa Rica, y destacan menos como mercados para la potente industria manufacturera china. Por otro lado, los que consideran a China como aliado geopolítico son irrelevantes como proveedores y también como mercado para los productos chinos, sólo relevantes en el terreno de lo simbólico, pero no lo son de la misma forma para el gigante asiático, que aplica una visión marcada por el pragmatismo en sus relaciones.
China concentra sus importaciones en pocos productos de esos países, aunque sus exportaciones son más diversificadas y eso tiene que ver con la potente industria manufacturera china y la escasa diversificación productiva de los países con TLC y supuestos aliados geopolíticos del gigante asiático, las proyecciones indican que aumentará su vulnerabilidad ante los ciclos de la economía china.

 

Jorge López Arévalo es Profesor titular de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Autónoma de Chiapas en México. Doctor en Economía Aplicada por la Universidad de Santiago de Compostela, España y Economista de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).